Tipo de Fruto: Las semillas del abedul se desarrollan en estructuras llamadas estróbilos (parecidos a pequeños conos o amentos femeninos) que se desintegran al madurar. Dentro de estos estróbilos se forman pequeñas sámaras.
Forma y Tamaño (de la Sámara): La semilla verdadera es muy pequeña y está flanqueada por dos alas membranosas bien desarrolladas, lo que le da una forma ovalada o elíptica muy aplanada.
La sámara completa (semilla con alas) es diminuta, midiendo típicamente entre 1.5 y 3 mm de largo y similar de ancho.
Color: La semilla central es de color marrón claro a oscuro, mientras que las alas son translúcidas o de un color pajizo muy claro.
Textura: La superficie es lisa.
Peso: Son extremadamente ligeras, una adaptación clave para su dispersión. En 1 gramo puede haber cientos o incluso miles de semillas.
Dispersión: La característica más importante de las semillas de abedul es su ala, que permite una eficiente dispersión anemócora (por el viento). Al ser tan ligeras, pueden viajar grandes distancias. Esto es fundamental para la colonización de nuevos espacios y la regeneración de bosques.
Viabilidad: Las semillas de abedul se consideran ortodoxas, lo que significa que pueden ser almacenadas en condiciones de baja humedad (alrededor del 5-8%) y bajas temperaturas (entre 1°C y 5°C) por periodos prolongados (varios años) sin perder significativamente su viabilidad.
Latencia (Dormancia): La mayoría de las semillas de abedul (incluyendo las especies siberianas) presentan latencia embrionaria. Esto significa que el embrión dentro de la semilla necesita pasar por un período de frío y humedad (estratificación) para "despertar" y poder germinar de manera uniforme y efectiva.
Tratamientos Pregerminativos: Para romper la latencia, se requiere un proceso de estratificación en frío húmedo:
Las semillas deben limpiarse (separarlas de las escamas del estróbilo).
Se mezclan con un sustrato húmedo estéril (como arena fina, turba o vermiculita).
Se colocan en un recipiente sellado (como una bolsa con cierre hermético) y se refrigeran a temperaturas bajas (generalmente entre 1°C y 5°C) durante un período de 30 a 90 días (1 a 3 meses). Es crucial mantener el sustrato ligeramente húmedo pero no empapado para evitar la aparición de moho.
Condiciones de Germinación (después de la estratificación):
Una vez completada la estratificación, las semillas se siembran superficialmente en un sustrato bien drenado.
Requieren luz para germinar (son fotoblásticas positivas), por lo que no deben cubrirse con mucha tierra.
Necesitan temperaturas más cálidas para germinar, idealmente entre 15°C y 25°C.
El sustrato debe mantenerse constantemente húmedo, pero sin encharcamientos.
Tiempo de Germinación: Después de la estratificación y en condiciones óptimas, la germinación puede comenzar en unas pocas semanas (generalmente de 2 a 4 semanas), pero puede ser algo irregular.
Reforestación y Silvicultura: Las semillas son fundamentales para la propagación del abedul en proyectos de reforestación, especialmente en zonas con inviernos fríos.
Paisajismo: Se utilizan para cultivar abedules con fines ornamentales, por su atractiva corteza, follaje otoñal y forma.
Madera: La madera de abedul es versátil, utilizada en muebles, contrachapados, pulpa de papel y leña.
En resumen, las semillas del Abedul Ruso son diminutas y aladas, adaptadas para la dispersión por el viento. Su latencia requiere un periodo de estratificación en frío para una germinación exitosa, imitando las condiciones naturales de su hábitat invernal.